Manifiesto

La Asociación Española de Historia Pública nace con el objetivo de contribuir al debate sobre los usos colectivos del pasado y a la democratización de la razón y el conocimiento históricos.

Trabajamos con la idea de contribuir a crear un espacio público plural para la discusión histórica, orientado por un inequívoco compromiso democrático. Queremos, por un lado, apelar a la responsabilidad cívica de quienes ejercen la historia de forma profesional, al mismo tiempo que buscamos reconocer la práctica de la historia en una ciudadanía que se interroga también por las urgencias del presente. Si bien encontramos preocupante la rearticulación en la esfera pública de relatos largamente deslegitimados por la práctica institucionalizada de la historia, queremos además construir un espacio de comunicación sobre el pasado que redefina las relaciones entre comunidades expertas y público, entre historiadoras/es y ciudadanía. Deseamos explorar, en fin, la posibilidad de nuevos consensos colectivos sobre los significados del pasado.

Entre los objetivos y principios de actuación de la asociación están los siguientes:

  • Contribuir a crear representaciones del pasado dignas de la atención pública, en formatos y medios no necesariamente académicos, pero manteniendo el rigor y los balances de la práctica institucional de la historia.
  • Facilitar a personas especialistas el acceso a espacios mediáticos e institucionales más allá de los centros educativos y las publicaciones científicas; renegociar la presencia de contenidos históricos en los medios de comunicación de masas.
  • Implicar, por otro lado, a la comunidad experta de la disciplina en la discusión pública de aquellos problemas y preguntas que plantea la opinión ciudadana.
  • Organizar actividades sobre temas (y en espacios) que faciliten la retroalimentación mutua entre las agendas de la investigación académica y las urgencias de la discusión pública sobre el pasado.
  • Ofrecer a las personas asociadas formación en medios, redes, lenguajes, métodos y formatos que complementen la circulación universitaria y escolar del saber histórico.
  • Abrir el debate sobre la reforma educativa de la historia (objetivos, contenidos, didáctica, libros de texto, debates, género, etc.) y sobre el tipo de memoria del pasado que se ha consagrado institucionalmente (fiestas, efemérides, leyes, monumentos, etc.).
  • Implicar a archivistas, cuerpo docente de todos los niveles educativos, profesionales de los museos, curadores y periodistas en el debate social sobre los significados del pasado.
  • Cooperar con colectivos sociales e instituciones dedicados a la historia local, la memoria histórica y la salvaguarda del patrimonio.
  • Implicar a la ciudadanía en la producción de la historia en todas sus fases, desde la orientación de las preguntas, la recogida y preservación de la documentación, la construcción del relato, las formas de su presentación y la discusión pública de nuestras representaciones del pasado.

Creemos, con Machado, que “está el ayer alerto al mañana” y que el presente nos convoca a un debate abierto y franco sobre las representaciones públicas del pasado común. Es por eso que nos ilusiona tu participación en este proyecto. Pensamos que una asociación de historia pública puede contribuir a la socialización de una historia popular no exenta de rigor, pluralismo, complejidad y razón crítica.

Ya han firmado el manifiesto…